Todo el día con el tema del himno. Pensemos aquí un poco sobre qué pudo pasar en el momento en la sala de realización de las instalaciones de RTVE y veamos si la consecuencia, la destitución del director de deportes de TVE, ha sido justa.
Me imagino que el director de deportes sabe que cuando suena el himno español se debe emitir sí o sí. Sin excusas. Para eso es el director, ¿no? Para saber esas cosas.
¿Podemos creeer que él por sus pistolas decidió en el momento del himno conectar con Bilbao para ver cómo estaba el ambiente? Yo opino que no.
Puedo entender que desde un nivel superior de dirección se le diera la orden de que, previendo que el himno iba a ser muy pitado en el estadio y que podía este hecho conllevar conflictos y comentarios al día siguiente, no emitiera el himno, a ver si nadie se daba cuenta.
Acto seguido las noticias en Internet comienzan a aparecer. Los titulares son: TVE censura el himno.
Desde la alta dirección se piensa –nos han pillado–, y se ordena que en el descanso lo vuelvan a emitir, pidiendo disculpas y achacando el tema a un error humano, pero retocado, reduciendo los gritos del público y subiendo el volumen de la melodía.
?Qué ocurre?, que en otras cadenas, como TV3, sí que se emitió el himno en directo, y notaron, en el descanso, que el que sonaba en TVE estaba retocado.
Otra vez las noticias corren en Internet y aparecen informaciones que denuncian este hecho.
De nuevo desde la direccion de nivel más alto se piensa –nos han vuelto a pillar. ¿Y ahora que hacemos?– Sencillo. Se le hecha la culpa al pobre director de deportes y se le cesa en sus funciones.
Así es como yo pienso que sucedieron las cosas. No sé si habrá sido así de verdad, pero no creo que me equivoque demasiado.
Veremos si el tema de tranquiliza o alguien canta y explica cómo fueron de verdad las cosas.
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